28.9.10

Hay una luna preciosa esta noche.
Su belleza se esconde en lo imperfecta que parece comparada con las lunas de las noches anteriores.
Aquellas que se dejaron ver, por supuesto. Otras fueron demasiado tímidas.

¿Por qué siempre vemos la misma cara de la luna?
Las monedas son más traicioneras. Aunque al menos a ellas siempre las encuentras, del tamaño que sean.

27.9.10

Lo he intentado. He pensado palabras, frases,… y me he imaginado distintas situaciones. Incluso soñándolo después soy incapaz de ponerle forma. Borro todo lo que escribo, pienso en una pared en blanco y sin fondo para poder conciliar el sueño. Da igual.

Huyo, corro por los parques, por las ciudades. Lugares que conozco pero que no tienen ni nombre ni historia. Grito a las personas, me visto de colores claros y hasta sé andar con tacones. Pierdo prendas de ropa antes de alcanzar una meta a la que nunca llego. Y paso de un lugar a otro por un ascensor que nunca deja de subir, ¿de subir a dónde?

Algo está ahí, detrás de mí. Puede pisarme los talones y nunca me alcanza, pero tampoco se detiene.

Todas soñamos alguna vez con el “sí quiero”, y también tememos romper lazos que nos unen.

Estoy cansada de correr en mis sueños. No los entiendo aunque les de forma. Y sigo intentando expresar algo que es más que un simple sueño.

3.9.10

Dicen que no hay razones, aparentemente, lógicas para volverse loco.
Ellas siguen hacia delante y las personas se quedan atrás.